Jorveis Ortegano Valecillo | Prensa El Sistema Portuguesa
La disciplina, destreza y vocación son elementos esenciales que deben acompañar a un músico para labrar su carrera. Esto lo ha tenido claro el percusionista guanareño, Andrés Eloy Gómez Crespo. Un talentoso joven formado dentro del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela; y que su firme determinación de ampliar su formación musical lo han llevado a obtener una beca en la prestigiosa Barenboim-Said Akademie de Berlín (Alemania).
Su capacidad y talento fueron apreciados en el riguroso proceso de audición que lo hacen acreedor de ser el segundo venezolano en ingresar en esta reconocida institución que en su pénsum combina la música y las humanidades.
Fundada en 2015 por el reconocido pianista y director de orquesta argentino-israelí, Daniel Barenboim, y el crítico cultural palestino, Edward Said; esta academia que funciona como un conservatorio superior brindará a Andrés Eloy la oportunidad de formarse -a partir del 12 de octubre de este año- en la práctica orquestal y en una licenciatura en música, bajo la guía de un cuerpo docente compuesto por artistas de renombre mundial.
Gómez comenta que el proceso de su aplicación fue largo. En 2020 audicionó en medio de la pandemia mundial del COVID-19. Sin embargo, a principios del año siguiente, recibió la noticia que habían sido canceladas las audiciones en el departamento de percusión, debido a la limitante de los solicitantes a tener acceso a todos los instrumentos de percusión por el confinamiento.
A finales de 2022, el percusionista retomó la meta de ingresar a la academia. Su determinación se mantenía presente, aplicó una vez más y envió los videos ejecutando las obras que serían calificadas. Para febrero del año en curso, fue invitado a hacer la audición presencial en Berlín. En el mes de mayo se presentó en la capital alemana, y fue allí donde obtuvo este importante logro para su creciente carrera musical.
Su trayectoria lo ha llevado a representar al país en diversas oportunidades. Una de las experiencias que suma en su currículum es haber sido seleccionado en 2022 para formar parte de la Orquesta Encuentros. Un proyecto del maestro Gustavo Dudamel que reunió a músicos de distintas orquestas juveniles del mundo, para una gira en los principales escenarios de California (Estados Unidos).
Gómez Crespo es integrante de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela, agrupación cúspide del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela. Y, recientemente, participó en el exitoso regreso del conjunto sinfónico en el Festival Internacional de Edimburgo, bajo la batuta de los maestros Rafael Payares y Gustavo Dudamel.
De Guanare a Berlín
Sus inicios en la música no es la típica historia del niño que “escuchó una sinfonía o vio un video y dijo: eso es lo que quiero hacer el resto de mi vida, esa es mi pasión”, asegura que no fue así. Fue gracias a la sugerencia del maestro percusionista, Acuarius Zambrano y al apoyo familiar que Andrés Eloy ingresó a la cátedra de percusión en el Núcleo Guanare, a la edad de 5 años.
Pasaron los años y en ese transcurrir de experiencias, de tocar, de vivir la música fue donde supo que la percusión marcaría su ritmo vital. “Me di cuenta que es el propósito de mi vida. No me veo haciendo otra cosa que no sea la música”, confiesa quien formó parte de la cantera de percusionistas del Núcleo Guanare con reconocida trayectoria dentro y fuera del país.
El que un guanareño y venezolano sea parte de la “Akademie” le genera un sentimiento muy especial. “De Guanare a Berlín hay un tramo, ¿no? nada más el hecho de pensar que alguien de una ciudad tan pequeña del Llano haya obtenido un lugar allí, me llena de alegría. Quizá para alguien de afuera le resulte curioso la procedencia, pero para nosotros que conocemos fielmente el trabajo que ha hecho El Sistema en cada rincón de Venezuela a lo largo de estos 48 años, no nos sorprende que se alcancen estos logros”.
En este sentido, reconoce con orgullo el gran aporte que el Sistema de Orquestas ha brindado en su formación musical y humana. “Yo soy lo que soy gracias a El Sistema. A esa obra de un venezolano ilustre y visionario como lo fue el maestro José Antonio Abreu. Por eso, tengo un enorme cariño, amor y gratitud a esta institución”.
Como mensaje final, el percusionista hizo una invitación a las nuevas generaciones de músicos a no dejar de soñar y de dejar de trabajar para ello. “Las oportunidades llegan porque llegan. El detalle es quién está preparado o no al momento de que se presenten. Si bien es cierto que pueden existir momentos de bajón, es el seguir teniendo la ilusión y las ganas de continuar creciendo en conocimiento lo que realmente hay que mantener presente”, resaltó.