Vía: Prensa Latina | (PL) El joven pianista chino Lang Lang, admirado como un ídolo en su país y un genio de la música en todo el mundo, prodigó hoy elogios para la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela (OSSBV) y su director Gustavo Dudamel. A solo dos días de su debut en Venezuela, Lang Lang expresó en una relajada conferencia de prensa todo su entusiasmo por el inminente concierto en que compartirá escenario con “la mejor orquesta de jóvenes del mundo” y el “mejor conductor de la hora”.

Por si no bastara esta alineación de astros, el instrumentista asiático interpretará este jueves a su compositor favorito, Piotr Ilyich Tchaikovski, en una velada que promete ser inolvidable para quienes asistan al auditorio Ríos Reyna del caraqueño Teatro Teresa Carreño.
Lang Lang (1982) se declaró impresionado tras sus primeros ensayos junto a la OSSBV, agrupación cúspide del prestigioso Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, fundado por el maestro José Antonio Abreu.
El pianista -quien a los cinco años ya protagonizaba recitales y a los 17 deslumbró al mundo tras sustituir a última hora a André Watts en un concierto junto a la Orquesta de Chicago- hizo votos por que en China pueda emularse el modelo venezolano, a pesar de que -reconoció- no existe allá una fuerte tradición orquestal.
En contraste, comentó sonriente sobre los 15 millones de jóvenes que hoy aprenden piano en el gigante asiático.
Displicentemente, Lang Lang -quien tocó en la inauguración de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008- apuntó que sus recitales en China tienen que ser organizados en estadios.
“Tocar el piano se ha convertido en una especie de moda en China”, aseguró este virtuoso ejecutante que viaja a todas partes junto a su madre y no para de sonreír y hacer bromas, en vital subversión de la severidad paterna y la educación oriental de su infancia.
Precisamente, fue su padre -un músico folclórico- quien lo enseñó a tocar el piano, contó Lang Lang.
Aunque -confesó- fue en 1986, escuchando a Vladimir Horowitz en una transmisión desde Moscú, cuando se convenció del verdadero poder de la música.
“Cuando tocó a (Robert) Schumann yo estaba en lágrimas”, dijo.
Pese a la fama, a su éxito de público y crítica, Lang Lang también se deshizo en elogios para Gustavo Dudamel (1981), director musical de la OSSBV, la Filarmónica de Los Ángeles y la Orquesta Sinfónica de Gotemburgo, Suecia.
“Él es un verdadero genio.. El mejor embajador de Venezuela”, aseguró sobre el joven maestro venezolano, a quien conoció en 2004 durante una cena en Berlín junto a ese mito contemporáneo llamado Daniel Baremboim.
Según Lang Lang, el pianista y conductor orquestal argentino-israelí afirmó entonces: “Este es el mejor nuevo director de nuestro tiempo”.
De vuelta al presente, el músico chino subrayó la energía positiva que despliega Dudamel en sus presentaciones y aclaró que sus alabanzas de ninguna manera se deben solo al hecho de que sean buenos amigos.
“Su personalidad, además de su musicalidad, lo hacen uno de los más importantes músicos de la actualidad”, aseveró Lang Lang, quien dio fe de haber dicho esto “desde el corazón” y desde sus “sentimientos más sinceros”.