En este maravilloso mundo de la música, es muy fácil sentirse frustrado, ansioso o deseperado porque las cosas sucedan ya y como nosotros queremos. ¿Es mucho pedir? Hacemos muchos sacrificios monetarios, sociales, físicos y emocionales con el fin de cumplir nuestros sueños. Pues aquí esta lo bueno: Si logras ser organizado, estás dispuesto a trabajar duro y comprender lo que sucede contigo y el mundo que te rodea, te darás cuenta que ser músico es una bendición y la profesión que más recompensas y buenos momentos puede dar en la vida.
1. Es un viaje, no un destino. Sí, lo queremos todo y lo queremos ya. Pero la ansiedad no es buena. Una vez tengas un proyecto de vida, entiendas que todo esto es un proceso y que cada pequeño triunfo debe ser celebrado, disfrutarás más del camino.
2. Alto al odio. ¿Sirve de algo criticar o envidiar lo que otros hacen? ¿Sirve hablar mal de alguien? Manten tu karma limpio. Si alguien habla mal de ti, no te rebajes a su nivel. Evita las malas companías que dañan tu visión y positivismo. Lo que nos lleva al siguiente punto:
3. Crítica constructiva. Debes saber diferenciar cuándo alguien te dice algo por tu bien de cuando te atacan por envidia o frustración. Mantente cerca de las personas que te critican constructivamente, esa es la gente que busca tu bien.
4. Aprende a decir NO. El decirle NO a una propuesta o petición no te hace una mala persona. Analiza bien cada proyecto y aprende a decir NO con sutileza, proponiendo una salida beneficiosa para todos. Te estás haciendo un favor a ti y al resto de personas involucradas.
5. Cuida tu cuerpo. Come sanamente y ejercítate al menos tres veces a la semana. Evita el consumo de sustancias que te traerán problemas a largo plazo. No hay mucho que explicar aquí.
6. Planeación. Abraham Lincoln dijo: “Si me dan seis horas para talar un arbol, pasaré las primeras cuatro afilando el hacha.” Planear un proyecto (analizar sus costos, beneficios, sacrificios, tiempos, etc) te ayudará a ahorrar tiempo y dinero.
7. Conócete ti mismo. Esto lo vienen diciendo los griegos desde hace miles de años. Conoce tus fortalezas y puntos para mejorar. Analiza cuál es la hora del día en que eres más productivo y aprovéchala al máximo. Aprende cuando es mejor retirarte de un proyecto que seguir perdiendo tu tiempo. Una retirada a tiempo es una victoria.
8. No seas un dolor de cuello. Este es uno de los consejos que más dan los profesionales. Buenos músicos hay muchos, siempre habrá alguien con más técnica o conocimientos que tú. Lo que te diferencia a cualquier nivel es tu forma de ser, si eres llevadero, si tienes buena actitud para enfrentar las situaciones que te ponen enfrente, si eres puntual, si eres profesional.
9. ¿Y el dinero? El tema que a pocos les gusta mencionar. Cualquiera sea tu posición (¿Me estoy vendiendo? ¿Estoy cobrando muy poco?, etc), te recomiendo que seas inteligente con tu dinero: no lo gastes en cosas innecesarias, planifica tus gastos todos los meses, mantén un fondo de emergencia y ahorra para tu retiro. Bueno, muchos músicos nunca se reitran, pero entiendes mi punto.
10. Sé agradecido. Tienes el poder de despertar muchos sentimientos con tu música, de brindar alegria y buenos momentos a otras personas, de tocar almas de una manera única. Tienes la profesión más linda de la vida. Hay mucho para agradecer.
11. Buen humor. No te tomes todo tan en serio. Recuerda que de todos los errores se aprende. Tómalos como accidentes que te pueden ayudar más adelante. El buen humor es probablemente la herramienta más importante que puedes tener en el negocio de la música. ¿Por qué? Porque lo vas a necesitar todos los días.