Aparte del vestuario, tema tratado en el capítulo de este portal “¿Qué me pongo?”, el comportamiento en un espectáculo de este tipo tiene ciertas connotaciones similares al de una ceremonia. Todas ellas son las mismas que se deben tener cuando se acude a cualquier otro espectáculo, pero en este caso parece que son más respetadas o al menos se conservan mejor.
1. Nunca debe llegar tarde a un concierto. De hecho, no sabemos si ahora se hace en todos los teatros y auditorios, pero no se deja entrar a las personas que llegan tarde. Deben esperar a que haya una pausa para poder entrar y ocupar sus asientos.
2. Cuando llegue al teatro o auditorio (siempre mejor con 10-15 minutos de antelación) no se debe permanecer mucho tiempo en el hall o los pasillos, y debe ocupar su localidad lo antes posible. No se puede entrar en tropel o todos en masa cuando suena el timbre de aviso de comienzo del concierto. Los acomodadores no darían abasto para colocar a toda esa ingente cantidad de personas.
3. Si está charlando con sus compañeros de asiento, la charla debe cesar en cuanto se apaguen o bajen las luces de la sala.
4. Salvo una gran necesidad, no debe abandonar su asiento en medio del concierto. Tampoco moverse demasiado o molestar a sus compañeros de localidad.
5. Si le da una tos persistente, estornudos o cualquier otro tipo de manifestación algo ruidosa, lo mejor que puede hacer es salir un momento al hall o al baño y tratar de que se le pase (tomar un caramelo, un vaso de agua, etc.).
6. Ni que decir tiene que no se habla, se chista o se hace cualquier otro ruido en medio del concierto. Tampoco se hace ruido con el programa de mano, con cosas que tengamos en la mano, en el bolso o los bolsillos.
7. Tampoco es correcto comer nada durante el concierto. Su butaca es para sentarse y escuchar el concierto, no para hacer un picnic de golosinas o de cualquier otro alimento. Ni que decir tiene que fumar está totalmente prohibido.
8. Debe aplaudir solamente cuando termine la ejecución de cada pieza o cada tramo de la obra. No se puede interrumpir la representación o ejecución de una obra con aplausos o gritos. Como esta parte, algunas veces, es difícil de determinar para los no duchos en música clásica, puede dejarse llevar por lo que haga el resto (como en la mesa se fija qué hacen los demás cuando no sabe que hacer, aquí puede hacer lo mismo).
9. En la ópera y en otras representaciones está permitido dar algunas voces o gritos como ¡Bravo!, ¡Bravo! Pero no es correcto, al menos en España, silbar a los músicos o actores. Puede que en otros países sea una muestra de “afecto” pero en España es símbolo de descontento.
10. Cuando la ovación es muy prolongada, puede que el director de orquesta salga varias veces a saludar. Si la ovación se prolonga puede que haga un bis (una repetición de una pieza o la ejecución de una nueva). Si empieza a tocar, deje de aplaudir y guarde silencio como hizo anteriormente.
11. A la hora de abandonar el teatro o auditorio espere a que vayan saliendo los ocupantes de los asientos más cercanos a los pasillos y no quiera salir usted el primero si está en medio de una fila con varios asientos a su derecha y a su izquierda. Deje que salgan ellos primero.
12. Por supuesto, no se quede hablando con amigos o conocidos en los pasillos, en el hall, etc. No se puede interrumpir el paso de la gente que quiere salir.
13. A la entrada debe dar una propina al acomodador que le acompaña a su asiento. Y al salir, si hay guardarropa, puede dejar también una propina al recoger su abrigo.
14. Tanto la entrada como la salida del teatro o auditorio debe ser silenciosa, ordenada y tranquila. Nada de prisas, carreras, voces, etc.
Situaciones especiales.
No son tradicionales en España, pero en el extranjero, sobre todo en América, puede encontrar recitales de música clásica al aire libre. En este tipo de recitales las normas pueden variar bastante de las dadas para los recintos cerrados.
1. Las personas suelen vestir de sport en este tipo de recitales.
2. Dependiendo del lugar de celebración, se puede hasta hacer un pequeño picnic mientras se escucha el concierto. Es como cenar con música de fondo.
3. Siempre con discreción se puede mover libremente por el parque o instalaciones al aire libre, escuchar una pieza nada más e irse, sentarse a medio concierto, etc.
4. Si se encuentra conocidos, amigos o familiares, puede charlar con ellos siempre sin molestar a los demás. Hablar con un tono de voz bajo.
En definitiva, al aire libre se permiten ciertas “licencias” que no pueden darse en un concierto en un lugar cerrado.