La CMCE 2024 emerge como un hito crucial en el panorama educativo y cultural global. Reuniendo a destacados líderes y expertos, este evento histórico busca replantear y revitalizar la educación artística y cultural en un mundo en constante transformación.
En un contexto de dinámica transformación global, donde la velocidad de cambio tecnológico e información es vertiginosa, los ámbitos educativo, artístico y cultural emergen como pilares hacia un horizonte más prometedor y equitativo. Estos se erigen como herramientas primordiales para el desenvolvimiento integral tanto de individuos como de colectividades.
La Conferencia Mundial sobre Cultura y Educación Artística 2024 (CMCE 2024), celebrada del 13 al 15 de febrero en el Centro Nacional de Exposiciones de Abu Dhabi, Emiratos Árabes Unidos, adquiere relevancia histórica al congregar una amplia gama de actores clave con el propósito de replantear la educación artística y cultural en un contexto de cambio constante.
Representando al Estado venezolano, participaron en el evento Eduardo Méndez, director ejecutivo de El Sistema, acompañado por delegados de la Cancillería y la Embajada de Venezuela en Emiratos Árabes Unidos. Méndez intervino como expositor en las conferencias “Los beneficios de la educación musical” y “Acceso equitativo a la educación cultural y artística”, llevadas a cabo el martes 13 y miércoles 14 de febrero, respectivamente.
En su ponencia sobre “Los beneficios de la educación musical”, Méndez destacó el caso paradigmático de El Sistema de Orquestas como evidencia palpable de cómo la educación artística puede fungir como una poderosa herramienta para el progreso social y la construcción de una sociedad más justa y equitativa.
En sus palabras: “La educación musical no debe ser concebida como un privilegio reservado para unos pocos, sino como un derecho fundamental que debe democratizarse. Es una política de inclusión social con el potencial de transformar existencias, cerrar brechas y forjar una sociedad más armónica y equitativa. Es crucial abogar por la inclusión de la educación musical en nuestras políticas sociales, asegurando que todos los niños accedan a la oportunidad de desplegar su potencial y contribuir así a un mundo más vibrante e inclusivo.”
Asimismo, en la conferencia “Acceso equitativo a la educación cultural y artística”, el director ejecutivo subrayó el papel crucial de la cultura y la educación como catalizadores de la cohesión social y la integración. Hizo hincapié en la necesidad de fortalecer los vínculos de colaboración cultural, educativa y artística entre los Estados miembros para construir un porvenir más próspero y equitativo.
Tras exponer el impacto de El Sistema en la vida de millones de niños y jóvenes a lo largo de sus 49 años de existencia, añadió: “Es imperativo que esta conferencia sirva como plataforma para fomentar la adopción de enfoques similares en otros contextos, con el fin de garantizar que más niños y jóvenes tengan acceso a una educación artística y cultural de calidad, evolucionando de las palabras a la acción, promoviendo el diálogo global donde cada participante pueda adaptar el diseño de planes artísticos y políticas culturales específicas que faciliten la masificación del acceso a la educación artística, reconociendo la importancia del desarrollo de la sensibilidad estética en los niños y jóvenes de hoy, quienes serán los líderes del mañana.”
Una arquitectura para la educación cultural
La CMCE 2024 brindó la oportunidad propicia para adoptar el Marco de la UNESCO para la Cultura y la Educación Artística. Una vez implementado, este se convertirá en un instrumento fundamental para que los países miembros formulen estrategias y políticas que integren la cultura en los sistemas educativos y fomenten el desarrollo de habilidades y competencias en niños y jóvenes a través de la cultura y las artes.
Este documento de la UNESCO busca promover una educación equitativa, inclusiva y de calidad mediante la cultura y las artes. Enfatiza su relevancia en el desarrollo humano, el pensamiento crítico, la creatividad y la cohesión social. Reconoce la necesidad de alinear los sistemas educativos con los objetivos de desarrollo sostenible y de promover el acceso inclusivo a la educación de calidad, respetando la diversidad cultural. Se compromete a aprovechar las sinergias entre la cultura y la educación para alcanzar resultados de desarrollo mutuamente beneficioso.