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El compositor, director y pianista venezolano José Agustín Sánchez nunca le tuvo miedo a los grandes retos, más bien lo motivan y lo inspiran.
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Fue el primer ser humano en escribir una obra sinfónica en el campamento base del Everest y ahora, este domingo 10 de junio a las 11:00 am, dará un concierto de piano u “ofrenda musical” al pie del Volcán Chimborazo en Ecuador, a más de 4300 metros sobre el nivel del mar. Pero ¿qué lo motiva a llevar su música a lugares tan recónditos? Uno de los elementos que más lo motivan es el amor y justamente el evento que forma parte de su gira Sonidos del Sur, será un tributo a ese sentimiento tan poderoso. El evento será transmitido y reseñado por sus redes sociales.
“Esta ofrenda musical está dedicada al amor, no solo como sentimiento, sino como perspectiva, como emergía, como fuerza de integración, de unión, de expansión, de libertad, de inspiración y como energía transformadora en la sociedad”, afirmó con rostro de emoción el tachirense José Agustín Sánchez, quien además dará una conferencia este viernes en Guaranda, capital de la provincia de Bolívar, sobre su gira Sonidos del Sur y hablará sobre su rol como compositor residente de la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas.
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Con su recorrido por Ecuador el maestro Sánchez continúa buscando inspiración para escribir diferentes obras, incluyendo una gran sinfonía que será estrenada por la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas. El repertorio de este domingo incluye uno de sus populares “Memes Cósmicos” dedicados al amor, así como una serie de temas del repertorio popular que también se nutren de ese sentimiento. El artista se encuentra en los alrededores del Chimborazo desde principios de semana, haciendo recorridos para ubicar el lugar ideal donde irá el piano que será trasladado desde la Casa de la Cultura de Quito.
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“El glaciar del volcán representó el paisaje con el cual nuestro libertador Simón Bolívar se inspiró para escribir su célebre poema Mi Delirio sobre el Chimborazo. Significa el amor que lleva a un hombre a buscar la libertad y la libertad que lo lleva a un amor desbordado por Manuelita Sáenz. El libertador escribe en su poema: Yo venía envuelto con el manto de Iris, desde donde paga su tributo el caudaloso Orinoco al Dios de las aguas. Había visitado las encantadas fuentes amazónicas, y quise subir al atalaya del Universo”, citó el compositor.
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Esta ofrenda musical que dará el compositor venezolano este domingo es realizada gracias al auspicio y patrocinio de la Casa de la Cultura de Ecuador, en especial al esfuerzo de su presidente Camilo Restrepo, quien desde un principio ha apoyado la iniciativa de Sonidos del Sur. Además ha estado trabajando con los núcleos que maneja la Casa la Cultura en las provincias de Chimborazo (Riobamba) y Bolívar (Guaranda), quienes están apoyando con toda la logística y la convocatoria. Vale recordar que el 27 de mayo Sánchez ofreció un concierto similar en la Ciudad Monumento Mitad del Mundo, con mucha aceptación del público ecuatoriano.
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“Cuando era niño me gustaban los volcanes, hacía maquetas de ellos y soñaba con la posibilidad de subir a un volcán, ahora la música me lleva a la presencia del volcán más alto del mundo, recorriendo sus cráteres, sus lagunas y su cumbre. Ese es el amor de niño que nos impulsa a soñar y fantasear, pero que se va perdiendo con la madurez por patrones que solemos adaptar de la sociedad, aunque la música lo mantuvo vivo en mí”, agregó.
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