Vía: Panorama.com.ve | Por Yesenia Rincón Castellano
Una relación de amor entre la guitarra y las apasionadas manos de Aquiles Báez se palpó en el Teatro de Bellas Artes de Maracaibo, donde el músico, compositor y productor consintió los oídos de más de 600 asistentes que asistieron a escucharlo y celebrar los 60 años de ese centro cultural.
“En éstas seis décadas del Teatro Bellas Artes se ha trabajado bajo la convicción de que la cultura es un elemento esencial para la vida, una bases en la educación de los pueblos y en el desarrollo del ser humano”. Con esas palabras abrió el espectáculo Adriana Vera, directora del Centro de Bellas Artes, CBA, Ateneo de Maracaibo, y afirmó: “Todas las actividades se han hecho bajo una óptica de excelencia y calidad”.
Juan Manuel García Arcaya, presidente de la junta directiva del CBA, también intervino recordando los inicios de la institución y destacando la labor de todos los trabajadores, en especial, dos que son los que más tiempo llevan trabajando allí: José Gregorio Segovia que tiene 25 años de servicio y Zenaida González con 37 años de labores.
Tras esas palabras, la música folclórica venezolana y ritmos latinoamericanos, sonaron frescos, gracias a la improvisación y el ‘punteo’, que ofreció Báez en fusiones con jazz, junto con otros dos talentosos músicos : El percusionista Adolfo Herrera, y el bajista Gustavo Márquez, con quienes conforma el trío Aquiles Báez.
El músico, compositor y productor será también el invitado especial en el concierto de celebración en Maracaibo de los 70 años de vida de Soledad Bravo, el próximo cuatro de diciembre en el Aula Magna de la Universidad Rafael Urdaneta.
“Cuando trabajamos juntos en los ensayos de ese concierto nos dimos cuenta que repasar su repertorio de éxitos de todos estos años era como repasar a través de su voz esos ritmos latinomericanos que yo siempre escucho desde niño, en su mismo entorno porque ella es como una tía”, contó Báez sonriente quien además confesó lo muy vinculado que se siente al Zulia, por la familia.
“Tengo una tías en Delicias a quien visitaba desde niño. Además tengo muy buenos amigos”. Entre esos “panitas” zulianos, subieron al escenario Ulises Hadjis quien cantó dos canciones y el repentista Víctor Hugo Márquez, quien recitó a partir de los nombre de Ana, la esposa de Aquiles Báez y sus dos hijos. También improvisó palabras rimadas en honor a los 60 años del Centros Bellas Artes.
Otra sorpresa en escena fue la presencia de José Gotopo, artista visual falconiano residenciado en Maracaibo, quien subió a entregarle un retrato hecho por él. Ambos se conocieron en Nueva York en el año 2000 donde ambos coincidieron por sus carreras artísticas.
El trío interpretó piezas originales de la autoría de Báez como Cachamay, La Negrita, A mis hermanos, así como temas nuevos y otros incluidos en su más reciente producción discográfica que ya han presentado en gran cantidad de teatros a nivel nacional e internacional.
Uno de los mejores momentos de la noche, con lo que mejor reaccionó la gente fue con la gaita Chinita de Maracaibo, cuya melodía salía como cantada por las cuerdas de la guitarra de Báez con el coro del público.
Otros amigos incorporados al concierto fueron el percusionista Carlos Aguirre que tocó la tambora y Néstor “El Chivo” quien frenéticamente tocó las maracas.
Báez ha formado parte de proyectos musicales de Simón Díaz, Paquito D’ Rivera, Ilan Chéster, Serenata Guayanesa, Huáscar Barradas entre muchos otros, así como ha creado la música de muchas películas nacionales y hasta actuó en un documental del cineasta español Fernando Trueba. Pero en el escenario fue amigable y próximo con el público, que en retribución, le ofrendó largos minutos de vítores de pie.