Las Cuatro Estaciones de Vivaldi fue la obra escogida para un inolvidable concierto en las instalaciones del Museo
El arribo a los 140 años de existencia del Museo de Ciencias (primer museo fundado en Venezuela) fue la ocasión propicia para celebrar con música el hecho de contar con un recinto que además de su historia, atesora un rico y diverso patrimonio de colecciones zoológicas, paleontológicas, mineralógicas, arqueológicas y etnográficas de distintas procedencias.
Honrada de haber sido invitada a este festejo, la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas, Gestión cultural de la Alcaldía del Municipio Bolivariano Libertador, llegó armada ni más ni menos que con una de las obras más conocidas del italiano Antonio Vivaldi: Las Cuatro Estaciones, joya musical que evoca distintos aspectos de las épocas del año, tales como la primavera, el verano, el otoño e invierno.
Edgar González, Presidente del Museo de Ciencias, dio comienzo al concierto explicando un poco el origen de este recinto, el cual se encuentra en el Museo Nacional y que tuvo en sus primeros pasos colecciones que reunían los reinos de la naturaleza con los artilugios producidos por el hombre. Igualmente señaló que durante las primeras décadas del siglo XX, fue cuando el Museo se estableció en la entrada del Parque Los Caobos, con una edificación obra de Carlos Raúl Villanueva (declarada Monumento Histórico Nacional en 1993) de inspiración neoclásica con rejería estilo art decó y cuyos muros y jardines se ornamentan con altorrelieves y esculturas de bulto de Francisco Narváez.
Acto seguido tomó la palabra el Presidente de la OSMC, Sadao Muraki, quien luego de cada movimiento ejecutado por los músicos de la orquesta comentaba sonetos ilustrativos que introducían mucho más a los espectadores en los paisajes que con las notas musicales se iban dibujando. El público por su parte plenó las instalaciones para escuchar el concierto, rodeados de inmensos ejemplares de la fauna nacional, continental y hasta africana, mostrándose maravillado y regalando aplausos tanto a los músicos como a los homenajeados.
La velada confirmó nuevamente la versatilidad de la Orquesta de Caracas, así como la posibilidad de unir esfuerzos que derivan en contenidos amenos y atractivos para nuestros ciudadanos, ávidos de saberse dueños de espacios tan amables y atractivos para todas las edades.
Para quienes aún no lo conocen, el Museo de Ciencias representa una lúdica y didáctica experiencia, altamente recomendable como una opción más para vincularse con la cultura y las artes en pleno corazón de nuestra querida Caracas.