Escrito por Prensa FundaMusical Bolívar
“Concursar en Asia frente a músicos asiáticos me causó un poco de intimidación”, confesó el laureado ejecutante de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, quien se midió en esta competencia internacional realizada en Tokio, Japón, ante 10 intérpretes de la región.
Venezuela vuelve a resonar en el ámbito internacional de la música académica. Esta vez, la profundidad y versatilidad de los contrabajistas formados dentro del Sistema de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela se plantó en Tokio, Japón, para llevarse otro 1º lugar: el del Concurso Internacional de Contrabajo “Rubato Strings”. Fue Óscar Luque, integrante de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, quien suma para sí y para el país un nuevo reconocimiento mundial.
Frente a un prestigioso jurado de intérpretes solistas de este instrumento, tales como Thomas Martin (Reino Unido), Thierry Barbé y Catalin Rotaru (EEUU), el único participante latinoamericano de esta justa musical se impuso sobre 10 contrabajistas de origen asiático seleccionados en ronda semifinal. Luque logró llevarse el primer premio, uno que alcanzó después de medirse ante cinco intérpretes que le acompañaron en la final de este concurso.
“La experiencia fue única. La verdad es que en estos concursos se aprende muchísimo de tantas escuelas. Lo más bello de todo es competir no solo por ganar, sino por disfrutar; por estar rodeado de buenos músicos”, expresó este caraqueño de 23 años de edad, quien interpretó durante el concurso la Sonata Arpeggione de Schubert, elCapriccio de bravura de Giovanni Botessini y el Concierto para contrabajo y orquesta en Si menor de este compositor italiano.
Óscar Luque, quien inició sus estudios del instrumento en el núcleo de San Agustín con la profesora Milene Marcano y se forma actualmente con el maestro Félix Petit, suma este reconocimiento internacional al que alcanzó en mayo de este año en Rochester, Nueva York, cuando ganó el 2º lugar del Concurso de Solo y el premio Tom Martin para la mejor interpretación de una pieza de Bottesini de la Sociedad Internacional de Bajistas (ISB, por sus siglas en inglés).
“Me siento muy feliz por colocar el nombre de El Sistema y de la Academia Latinoamericana de Contrabajo en el primer lugar. Estoy orgulloso de darle este premio a Venezuela; de descubrir que El Sistema cada día sube su nivel increíblemente, no solo las orquestas, sino también los muy buenos jóvenes solistas que hay en cada una de ellas”, aseguró desde Tokio el joven contrabajista.
Finalmente, agradeció y valoró “la gran visión” del maestro José Antonio Abreu, fundador de El Sistema, a quien consideró fundamental para alcanzar este logro. Asimismo, dedicó un profundo reconocimiento a su maestro Félix Petit, “quien no deja de crear tan buenos contrabajistas aquí en Venezuela y no solo enseña a tocar el instrumento, sino a ser cada día mejor persona”.
Este es uno de los varios reconocimientos internacionales que en este 2013 han alcanzado los músicos formados por el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, ente regido por la Fundación Musical Simón Bolívar, adscrita al Ministerio del Poder Popular del Despacho de la Presidencia y Seguimiento de la Gestión de Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela y que dan testimonio de cómo “los niños y jóvenes venezolanos triunfan con la música”, lema que ha acompañado a la institución durante la celebración de su 38 aniversario.