La agrupación venezolana se presentó en el Conservatorio Nacional Superior de Música y Danza de París y en el Club Duc des Lombards
Prensa FundaMusical Bolívar-Mppdpsgg
El Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela ha demostrado al mundo entero su enorme potencial para crear excelentes orquestas en los predios de la música académica. Pero ahora no solo son agrupaciones clásicas, el proyecto creado hace 40 años por el maestro José Antonio Abreu demuestra que también puede dar grandes frutos en otros géneros como es el caso del jazz, y la Simón Bolívar Big Band Jazz es un ejemplo claro, comenzando en forma triunfal su gira por Francia.
El martes 6 de octubre, la Simón Bolívar Big Band Jazz, dirigida por el maestro Andrés Briceño, ofreció dos exitosos conciertos a sala llena. El primero tuvo lugar a la 1:00 pm en el Conservatorio Nacional Superior de Música y Danza de París, institución educativa que vio nacer a grandes artistas mundiales, donde los músicos venezolanos compartieron escena con la Big Band de dicho conservatorio. La segunda presentación se llevó a cabo en horas de la noche en el local de jazz más importante de todo París: el Club Duc des Lombards, junto al renombrado saxofonista francés Samy Thiébault.
Con un repertorio que combinó standards de jazz con temas de la música venezolana, la Simón Bolívar Big Band Jazz dirigida por el maestro Andrés Briceño sorprendió a una audiencia francesa conformada mayormente por músicos, críticos y melómanos. Clásicos universales como Tribute to Miles, Caravan o Angel Eyes fueron del deleite del público, pero lo que más gustó fueron las canciones de Aldemaro Romero llevados al formato del jazz: El Catire, El negro José y Me gusta soñar, que con su original propuesta hicieron que los franceses se preguntaran: “¿De dónde salió esa música tan maravillosa?”.
También causó una profunda impresión el enorme nivel musical de los niños Andrés Briceño (batería) y Diana Valero (piano), ambos con 12 años de edad. Los franceses no se explicaban cómo a tan corta edad ya podían formar parte de una Big Band de tan alto nivel, representando otra prueba del éxito del modelo de El Sistema.
“Esta orquesta es maravillosa, de altísimo nivel, estoy impresionado por su calidad, sobre todo por su forma de combinar el jazz con la música de Latinoamérica, ofreciendo una propuesta diferente”, declaró tras la presentación de los venezolanos Riccardo del Fra, director artístico del departamento del jazz del Conservatorio Nacional y Música y Danza de París, quien además es un renombrado contrabajista mundial, que inclusive formó parte de la banda del legendario Chet Baker.
Bruno Mantovani es una institución en el medio musical europeo. Además de sus grandes dotes como compositor y ejecutante del piano, desde 2010 es el Director del Conservatorio Nacional y Música y Danza de París. Vestido con una chaqueta del tricolor venezolano, asistió con gran entusiasmo al concierto. “He tenido el privilegio de presenciar los conciertos de las diferentes orquestas de El Sistema que han venido a París y ahora me siento muy feliz de ver el éxito de su Big Band de Jazz, quienes han ofrecido un excelente concierto, estamos muy honrados y felices de tenerlos aquì”, declaró Mantovani.
Club Duc des Lombards. Ubicado en una de las zonas más concurridas de la vida nocturna parisina, el Clud Duc des Lombards se ha convertido en el templo del jazz de la ciudad de las luces. En él se han presentado artistas de la talla de John Pizzarelli, Nicholas Payton, Luis Perdomo y Otis Brown. Pero en la noche del 6 de octubre sucedió algo diferente que hizo que el público comenzara a hacer cola en la puerta del local desde temprano: la presencia de una agrupación de El Sistema, que actuaría en conjunto con una de las figuras más representativas del jazz contemporáneo francés: el saxofonista Samy Thiébault.
La Simón Bolívar Big Band Jazz junto a su anfitrión francés, ofrecieron dos funciones para los amantes del jazz con un repertorio conformado mayormente por temas del propio Thiébault, que fue trabajado en conjunto tras intensas sesiones de ensayo. El público no cesaba de aplaudir y muchos se preguntaban “¿cómo siendo tan jóvenes pueden tocar esta música tan bien y con tanto estilo?”. En un momento del show, el director Andrés Briceño soltó la batuta y tomó las baquetas para descargar un solo de batería que adapta la percusión afro-venezolana al instrumento con mucha originalidad, lo que levantó al público de sus asientos.
“Me siento conmovido por esta experiencia de trabajar con la Simón Bolívar Big Band Jazz, tanto a mí como a mi banda nos han tocado el alma. Hasta ahora ha sido una experiencia fantástica y que creo que nuestro trabajo conjunto seguirá siendo muy exitoso durante la gira”, expresó Thiébault.
“Hace poco estuve en Caracas trabajando con la Venezuela Big Band Jazz de El Sistema y ahora aquí, en Francia, pude presenciar ambos conciertos de la Simón Bolívar Big Band Jazz, también de El Sistema, y entonces puedo decir con propiedad que Venezuela se encuentra en un lugar importante dentro de la escena del jazz (…) Me encantó la forma de combinar la música venezolana, ofreciendo un nuevo sonido, representando una contribución al género y creo que eso es lo que deben dedicarse a hacer las agrupaciones”, enfatizó otro de los principales representantes de la escena del jazz francés: el multi-instrumentista Jowee Omicil.
Ahora la Simón Bolívar Big Band Jazz se prepara para su próximo concierto que tendrá lugar el viernes 9 de octubre en el Festival de Jazz de Garonne, celebrado en Marmande. Al día siguiente, de regreso en París, darán su cuarto concierto en las instalaciones del Conservatorio Choisy Le Roi, compartiendo en ambas presentaciones con Samy Thiebault.
Esta gira por Francia es una realidad gracias al apoyo del Estado venezolano; de la Alianza Francesa de Caracas; la Ecole Des Roches, el Conservatorio Nacional Superior de Música y Danza de París, el Conservatorio de las Artes Choisy Le Roi, el Conservatorio de Limonest y la asociación Les Petites Mains Symphoniques.