Vía: abcdesevilla.es | Por: Susana Gaviña
El director titular de la Filarmónica de Berlín, recuerda en un comunicado su entrañable relación con quien le antecedió en ese podio: «Hemos perdido a un gran músico y a un hombre muy generoso»
Quien también ha querido dedicarle palabras de cariño y de despedida a Claudio Abbado ha sido Simon Rattle, que sustituyó al director italiano al frente de la Filarmónica de Berlín después de más de una década como su director titular (1989-2002). Con él ha compartido también su compromiso por la educación, y el uso de la música como puente e instrumento social tanto en los países con índice altos de pobreza y de violencia (ambos admiraban el Sistema de orquestas creado por José Antonio Abreu en Venezuela), como en los sectores más desfavorecidos de otros más avanzados, como Alemania.
A través de su página web, Rattle se refería así a la muerte de Claudio Abbado.
«Hemos perdido a un gran músico y a un hombre muy generoso. Hace diez años todos nos preguntamos si iba a sobrevivir a la enfermedad que ahora le ha costado, pero en cambio, él, y nosotros como músicos y público, pudimos disfrutar de un extraordinario veranillo, en el que todas las facetas de su arte se unieron en una experiencia inolvidable.
Él me dijo hace unos años: “Simón, mi enfermedad era terrible [en 2000 le fue diagnosticado un cáncer], pero los resultados no han sido del todo malos: siento que de alguna manera he oído desde el interior de mi cuerpo, como si la pérdida de mi estómago me hubiera dado oídos internos. No puedo expresar lo maravilloso que ha sido esto. ¡Y todavía siento que la música me salvó la vida en ese momento!”
Siempre ha sido un gran director, sus actuaciones en estos últimos años fueron trascendentes, y todos se sienten privilegiados de haber sido testigos de ello. Personalmente, él siempre fue inmensamente amable y generoso conmigo, desde mis primeros días como director de orquesta, y mantuvimos un contacto cálido y divertido juntos, incluso hasta el viernes pasado. Él sigue estando en el fondo de mi corazón y en mis recuerdos».
También la Filarmónica de Berlín ha lamentado el fallecimiento de Abbado, quien fue su «inspiración» y dio forma a su obra musical desde los primeros conciertos que condujo en la capital alemana, ya en 1966.
Desde su página web, la Filarmónica elogió a Abbado como una persona y un músico excepcional y mostró su orgullo por haberlo tenido entre sus directores.
«Su amor por la música y su insaciable curiosidad fueron nuestra inspiración y marcaron nuestra obra musical», recalcó la orquesta.