Modest Mussorgsky dibujó en notas musicales los cuadros de su gran amigo Viktor Alexandrovich Hartmann, quien moriría a los 39 años. Quiso retratar en la música, en 1874, la exposición póstuma de sus obras. Escribió 15 piezas plasmadas en la obra Cuadros de una exposición, que fue compuesta solo para piano, pero que el francés Maurice Ravel se encargó de orquestar. Los colores de esta historia fueron los que atraparon al joven director venezolano Jorge Luis Uzcátegui. Convirtiendo sus pinceladas musicales en una de sus obras favoritas, con tan buen resultado interpretativo que la obra dirigida por él fue incluida en el soundtrack de El Cerrito, documental premiado y difundido por el canal History Channel.
Este domingo 27 de abril a las 11:00 a.m., Uzcátegui se reencontrará con Cuadros de una exposición de Modest Mussorgsky en Caracas, al conducirla junto a los integrantes de la Orquesta Sinfónica de Juventudes Francisco de Miranda (OSJFM) en la Sala Simón Bolívar del Centro Nacional de Acción Social por la Música en Quebrada Honda, a las 11:00 a.m. La entrada es libre.
Antes de ser director, el joven debutó en el mundo de la música como pianista, cuando tenía 14 años, acompañado de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela. En su carrera ha estado frente a la prestigiosa Filarmónica de Berlín, la Orquesta de la Ópera de Frankfurt, la Filarmónica de Rotterdam y la Filarmónica de Los Ángeles, entre otras. Actualmente reside en Los Ángeles donde se desempeña como director titular de la Seraphim Symphony y la BLYSO Orchestra; además, de ser el director musical y fundador de la Backyard Academy Symphony Orchestra, una organización dedicada a enseñar música a niños de familias de bajos recursos.