El sonido se quedó para siempre
Desde sus inicios, el cine ha evolucionado de manera vertiginosa. Las tecnologías que hoy disfrutamos en las salas, con las que están confeccionadas las películas, son resultado de una escalada de avances tecnológicos con resultados sorprendentes.
Vía: hipertextual.com
El cine sonoro tuvo sus grandes opositores pero únicamente muy al principio pues solo dos años más tarde del estreno de “The Jazz Singer”, al menos 350 películas ya eran sonoras; bien se puede decir que el resto es historia.
Vitaphone
“The Jazz Singer” no sería la primera obra cinematográfica en utilizar la tecnología Vitaphone pero sí es considerada como el primer largometraje sonoro. Otros sistemas como el Phonofilm, desarrollado por Lee De Forest, logró incorporar el sonido a las imágenes proyectadas. Una prueba de esto es su cortometraje de 11 minutos titulado “Conchita Piquer (From far Seville)”, obra en la que participa la artista española interpretando canciones y bailando.
The Jazz Singer
La historia va de Jakie Rabinowitz, un joven perteneciente a una familia judía ultra ortodoxa que se rehúsa a ser la quinta generación de rabinos de la misma. Su pasión por la música lo hacen declinarse por esta carrera y es donde se convierte en Jack Robin, el cantante de jazz. El drama con su familia y, sobre todo, su estricto padre, así como la evolución de su carrera son los hilos que podemos disfrutar en esta cinta sonora que abriría para siempre el camino del sonido en el cine.