Vía: CiudadCCS.com | Por Igor García
Un gran regalo entregó la Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas a la ciudad capital, cuando en el Teatro Municipal se presentó la obra de Federico Pacanins: Billo, una revista musical.
Con la música que durante décadas compuso e interpretó el maestro Billo Frómeta, esta puesta en escena deleitó a los habitantes de una ciudad que mantiene en su recuerdo los tiempos aquellos en los que las guarachas, los pasodobles, los boleros y los merengues eran motivo de alegría en plazas y centros nocturnos.
Para esta actividad se invitó a la directora Elisa Vegas y al cantante Memo Morales, un baluarte en la orquesta Billo’s Caracas Boys de los años 70 y 80.
La escogencia para celebrar los 446 años de la fundación de Caracas no podía ser más acertada. La música de Billo llenó los espacios de los hogares venezolanos desde 1937, cuando realizó su aparición en esta ciudad, desde República Dominicana, fundando la orquesta Billo’s Happy Boys.
Con sus composiciones, Luis María Frómeta, mejor conocido como Billo, se transformó en cronista popular de Caracas. Le cantó a sus fantasmas, a sus brujos, a sus personajes y a muchas situaciones jocosas que la gente tomó como parte de su vida cotidiana.
La obra se inició con las palabras del director musical, Rodolfo Saglimbeni, quien exaltó el valor popular de Luis María Frómeta y de su obra.
Luego, la batuta de Elisa Vegas dio inicio a los acordes de Isidoro, una canción que evoca al último cochero de la Caracas de los años 40.
El mosaico número 1 continuó la fiesta en las voces de Andrea Sousa, Nereida Machado, Daniel Jiménez, Juan Manuel Blanco y Jesús Pérez. Posteriormente, una escena de teatro evocó el tiempo en que las orquestas se presentaban en las emisoras radiofónicas.
Siguieron las notas de Mosaico 7 y Mensaje a Juan Vicente, en la voz de Daniel Jiménez. Se recordaron las notas musicales dedicadas a Emilita Dago, cantante cubana con numerosos éxitos en el país y a Paula Bellini, reina de belleza italiana que visitó Venezuela, junto con canciones que hicieron época, como La vaca vieja y el tema de la orquesta de Billo Para bailar.
Memo Morales arrancó los aplausos de un público de pie, como una combinación con las últimas composiciones del dominicano.
El final estuvo reservado a Canto a Caracas, interpretada por Daniel Jiménez y María Isabel González.