Por JORGE VÁZQUEZ PACHECO
Es una de los organismos profesionales de más reciente irrupción en el panorama mexicano. Iniciadas sus actividades en septiembre de 2014, la Orquesta Filarmónica de Boca del Río se establece como un modelo de actividad artística en el Estado de Veracruz, cuyo desempeño se diversifica hacia tres vertientes elementales: conciertos sinfónicos, de cámara y enseñanza infantil.
En este último renglón, el programa de educación musical para niños y jóvenes se ha denominado “Orquestando Armonía” y su concepto elemental se deriva del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, aunque con la debida adaptación hacia el entorno veracruzano. En esto se involucran dos jóvenes elementos surgidos del mismo Sistema venezolano. Se trata del violinista José Gregorio Sánchez y el cornista Rafael Arias.
Después de prepararse artísticamente en “el Sistema” durante diez años, bajo la guía de los profesores José Francisco del Castillo, José Gregorio complementó su formación en la Juilliard School de Nueva York y en la división Preparatoria del Instituto Suzuki de Temple, en Filadelfia. Fue director fundador del programa “A tocar, Mazatlán” en Sinaloa (2012) e implementó por vez primera el Método Suzuki de enseñanza infantil en el Instituto Superior de Música del Estado de Veracruz. Su experiencia como integrante de orquestas incluye una permanencia de cinco años en la Orquesta Simón Bolívar de Venezuela, con la Juilliard School Orchestra (de 1987 a 1999), breves permanencias con orquestas Sinfónica de Xalapa (México), Filarmónica de Las Vegas, Sinfónica de Lancaster, Sinfónica de Delaware, Philadelphia Virtuosi y de Cámara Black Pearl, antes de integrarse formalmente a la Filarmónica de Boca del Río.
En esta última ciudad pone en juego sus amplias conocimientos como enseñante ante decenas de jovencitos integrados a las dos orquestas sinfónicas infantiles, fundadas recientemente en este territorio.
Por lo que respecta a Rafael Arias, cuenta con preparación como ejecutante de corno en el Sistema entre 1997 y 2010, bajo la guía de los profesores Andrés Aragón, José José Giménez y Fernando Mora, con clases magistrales recibidas de Will Sanders, Javier Bonet, Fergus McWilliam, Manuel Pérez y Jean Pierre Cenedese. Cuenta con licenciatura en Música por la Associated Board of the Royal School of Music (Reino Unido), obtenida con Distinción en 2015. Su experiencia incluye participación con las orquestas Sinfónica Municipal de Caracas, Sinfónica del Estado Mérida, World Youth Orchestra, The World Orchestra, Youth Orchestra of Americas, además de su permanencia en la Sinfónica Regional y Banda Sinfónica del Estado Mérida.
Con extensa actividad en los terrenos de la música de cámara, ha participado en clases maestras con el Berlin Philharmonic Quintet y Spanish Brass, entre otros ensambles importantes. Como solista ha interpretado el Concierto 3 de Mozart, los conciertos de Strauss y Glière, así como las Sinfonías Concertantes de Mozart y Breval. Actualmente, Arias cubre el puesto de Primer corno en Boca del Río.
La próxima sede de la Filarmónica de Boca del Río
Sánchez y Arias mantienen una notoria expectativa ante la inminencia de la inauguración del Foro Boca, recinto que será sede de la Filarmónica de Boca del Río y que habrá de contar con las más avanzadas técnicas acustológicas en todo el país. Se trata de un proyecto planeado para inaugurarse en noviembre del presente 2016, cuyo diseño no solo es acorde con el crecimiento cultural de esta zona. También se integra al paisaje del Golfo de México mediante una arquitectura que retoma las formas estructurales propias de las escolleras que dividen el río Jamapa con el océano, en un conjunto que “las reinterpreta en un edificio de concreto aparente, formado por diversos volúmenes que se organizan en forma aleatoria para contener a la sala de conciertos”, de acuerdo a la definición del arquitecto mexicano Michel Rojkind.
Al abundar sobre ello, Rojkind indica lo siguiente: “La localización del Foro Boca tiene la intención de articular las dinámicas del centro de Boca del Río con la avenida costera, tiene la finalidad de ser un detonador urbano capaz de incitar la modernización de esta zona, y es un instrumento que ha permitido construir y renovar la infraestructura e imagen urbana de esa parte de la ciudad.”
El resorte impulsor de este ambicioso programa es el alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez, con el auxilio de Enrique Márquez Almazán, un joven músico egresado de la Academia de Artes de Interlochen, y de las universidades de Indiana y Harvard. Márquez Almazán funge como director ejecutivo de “Orquestando Armonía” y de la Filarmónica, cuyo director artístico es el renombrado maestro Jorge Mester.