EFE | Alemania evoca con ocasión del tricentenario de su nacimiento la figura de Carl Philipp Emanuel Bach, virtuoso del piano y compositor celebrado por sus contemporáneos, aunque eclipsado para la posteridad por la figura de su padre, el célebre Johann Sebastian Bach.
La vida y obra de C.P.E. Bach, nacido el 8 de marzo de 1714, han sido recuperadas a través del lanzamiento de un nuevo CD -”Concertos & Symphonies, de Berliner Barock Solisten-, exposiciones y ciclos musicales, sobre los que inevitablemente planea el conocido refrán: “De tal palo, tal astilla”.
Venir al mundo como segundo hijo de Johann Sebastian Bach y consagrarse a la composición musical casi predestinó a Carl Philipp Emanuel a quedar relegado a la categoría de heredero sin trono entre los grandes compositores universales.
La consideración es injusta para este renovador de la composición y el arte del piano, que disfrutó del aprecio de sus contemporáneos y en quien grandes de la música como Joseph Haydn, Lufwig van Beethoven o Wolfgang Amadeus Mozart vieron un modelo a seguir.
“Él es el padre, nosotros los muchachos. Si alguno de nosotros sabe hacer algo bien, es porque lo aprendimos de él”, es la frase frecuentemente atribuida a Mozart referida a Carl Philipp Emanuel Bach, a modo de exponente de su relevancia en la historia de la música.
Con el objetivo de recordar el legado del compositor se celebra el Festival Germano-Polaco de Música, abierto la semana pasada y que se cerrará el próximo 9 de marzo en la ciudad alemana de Fráncfort del Oder, junto a la frontera.
Amplio programa de celebración
La Biblioteca Nacional de Berlín -Staatsbibliothek- inauguró además este miércoles la exposición titulada “Ensayo sobre el arte auténtico de tocar el piano”, centrada en sus treinta años como compositor y maestro en la corte de Federico el Grande, en Berlín.
El tricentenario del nacimiento del compositor abarca un amplio programa de más de 200 actos, repartidos a lo largo del año entre las ciudades más identificadas con su obra: Berlín, Hamburgo, Potsdam, Fráncfort del Oder, Leipzig y su Weimar natal.
Nació el 8 de marzo de 1714 en esa ciudad sajona, considerada la cuna del clasicismo no solo por su vinculación a grandes compositores alemanes, sino porque ahí vivieron y escribieron los poetas Schiller y Goethe.
Ahí pasó su infancia, hasta que su padre se trasladó con toda la familia a Köthen y luego a Leipzig, donde ejerció de cantor en la Iglesia Luterana de Santo Tomás.
Su formación musical corrió a cargo de su padre y después cursó estudios tanto en esa misma ciudad sajona como en Fráncfort del Oder, a lo que siguió su larga trayectoria en la corte del rey prusiano, etapa a la que corresponden sus grandes composiciones para piano.
A su etapa en la corte prusiana siguió otro largo periodo en Hamburgo, donde ejerció como director musical de cinco iglesias, desde 1768 hasta su muerte, el 14 de diciembre de 1788.
Junto a la mencionada exposición abierta este 8 de marzo en Berlín tendrá lugar, coincidiendo con la fecha de su nacimiento, un concierto en la Iglesia de San Miguel de Hamburgo, ciudad que asimismo dedica una gran muestra a su obra, en la biblioteca de su Universidad.