Desde Orfeo con su lira a los cantantes de rap de hoy en día, la música ha ayudado siempre a expresar las emociones. En momentos de incertidumbre como el que estamos viviendo actualmente donde todo se tambalea, el lenguaje universal de la música puede representar la mejor herramienta para expresar, compartir y hacer entre todos un mundo mejor. Hace más de 2000 años, Aristóteles ya teorizó sobre la influencia de la música en los humanos y a lo largo del siglo XX se han podido desarrollar y comprobar científicamente estas teorías. Que la música aporta beneficios físicos y psíquicos es, por tanto, una evidencia, pero todavía nos haría falta romper algunos tópicos para hacerla accesible a todos, toda la música, no sólo la clásica, no sólo la moderna, el concierto de hoy nos da la oportunidad.
Rompamos pues los tópicos de que la música clásica es para la gente mayor, aburrida, carca y elitista, y lo podemos hacer en una sola frase: En el concierto de hoy, un público de todas las edades podrá escuchar gratuitamente dos jóvenes instrumentistas interpretando un repertorio con los mismos ingredientes que puede tener un concierto de jazz o uno de rock: ritmo, melodía y armonía.
Lo que resulta aburrido, carca y elitista es dar crédito a estos tópicos, la música (clásica, moderna, postmoderna o futurista), es para todo aquel que la quiera escuchar. Hoy ha sido para muchos el primer contacto con Bach, Debussy o César Franck, si no es su caso le proponemos un ejercicio: Esta noche, al llegar a casa, escucha un fragmento de cualquier música que hasta hoy le haya parecido ajena y disfruten la, buscar el sentido, encuentra el mensaje, seguro que no os dejará indiferentes.